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La ortoqueratología (orto-k) es un método cada vez más común que consiste en la reducción o eliminación temporal de los defectos de visión. Este tratamiento permite tener una buena visión, durante el día, sin necesidad de someterte a cirugía ni utilizar gafas. Lo característico de estas lentillas de contacto es que su uso es nocturno y no diurno. El número de personas que utilizan este tratamiento está creciendo exponencialmente desde hace varios años.
¿Cómo funciona el tratamiento con Orto-K?
Para comenzar con la ortoqueratología, el paciente debe acudir a una óptica o clínica oftalmológica donde un experto analizará su situación y determinará cuáles son las lentes más adecuadas para él, además de enseñarle su manejo. Una vez el diseño de lentillas orto-k se ha adaptado a su medida, será necesaria una revisión tras la primera noche, otra después la primera semana y, por último, una a las 3 semanas.
Mediante el uso de estas lentillas correctoras, la capa más externa del ojo, el epitelio corneal, se adapta suavemente a esa forma de la lente. Este cambio de curvatura no causa ninguna molestia o sensación diferente al de una lentilla mensual o lentilla diaria. Tras el descanso nocturno del ojo es suficiente para que éste se haya adaptado a esa curvatura, obteniendo una visión totalmente nítida. Este efecto dura todo el día y va desapareciendo paulatinamente hasta que el ojo vuelve a su estado original en unos días.
La curvatura interior hecha a medida de las necesidades del paciente, con un diseño diferente según se trate de si es miope, hipermétrope o astigmático. No todo el mundo puede utilizar este tratamiento, se han de hacer unas pruebas previas. El paciente ideal es aquel que presente miopía inferior o igual a -4,50 dioptrías asociada o no a un astigmatismo de hasta 1,50 dioptrías.
La adaptación a unas lentillas orto-k
La adaptación de unas lentillas de orto-k debe ser realizado por optometristas que cuenten con los equipos necesarios (imprescindible el uso de un topógrafo corneal) y realicen de forma exhaustiva controles periódicos, para asegurar una adaptación rápida, segura y predecible. Las lentillas de orto-k son de reemplazo anual y es imprescindible seguir la limpieza indicada por el especialista.
La ortoqueratología es un método muy recomendable si hablamos acerca de lentillas para niños con un grado de miopía de -2.00/-3.00 que crece con gran rapidez, si dicha condición se cumple, es el candidato indicado para comenzar con orto-k. Estas lentillas correctoras frenan parcialmente el crecimiento de la miopía. Este tratamiento es un sistema idóneo para deportistas, personas que presenten sensación de sequedad ocular con sus lentes de contacto o todas aquellas personas que se sientan más cómodas sin utilizar lentes de contacto durante el día.
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