Sin lugar a dudas, comprar lentillas hoy en día es una auténtica osadía, debido a la gran oferta que existe en el mercado y las nuevas marcas que salen constantemente.
Sin embargo, hasta los momentos, y de forma general, las lentillas pueden llegar a causar una serie de problemas comunes de los que tienes que estar enterado(a).
Aunque, a lo largo de este post no solo exploraremos los problemas, sino que también las posibles soluciones a ellos.
¿Quieres conocer las complicaciones más comunes que traen las lentillas y cómo solucionarlos? Pues sigue con nosotros para averiguarlo.
10 problemas más comunes con las lentillas
Aquí tienes una lista con los 10 problemas más frecuentes que experimentan los usuarios de este producto para una óptima corrección visual.
1 Sequedad ocular
Este es uno de los principales problemas y es muy, pero muy común, la sequedad ocular u ojo seco. No solo en usuarios de lentillas, sino que también en personas que no las usan
Para esta clase de problema, lo normal es utilizar gotas para los ojos, las cuales podrán proporcionar un alivio temporal. Pero lo mejor es que acudas al profesional de la visión para que valore tu caso y te aconseje.
2 Intolerancia a las lentillas
Este problema puede asombrar a más de un usuario de lentillas, pero así es, existen personas intolerantes al uso de lentillas.
Y esta intolerancia, puede presentarse con síntomas que parecieran de algún otro problema de salud visual o que es ocasionado por poca higiene. Para salir de dudas en este caso, es mejor acudir a un especialista lo antes posible.
3 Agentes deshidratantes
Trabajar o pasar mucho tiempo en lugares secos o con mucho polvo puede hacer que tus lentillas se sequen o incluso se deterioren más rápido.
En este caso, las gotas para los ojos también pueden ser una de las mejores soluciones ante este problema, y nos estamos refiriendo a las diseñadas especialmente para ser utilizadas con las lentillas puestas. Recomendamos también consultar con tu profesional para que te indique las más apropiadas.
4 Las alergias
Existen muchas personas que sufren de alergias y estas suelen verse reflejadas en los ojos.
En esta situación, lo mejor es usar lentes desechables diarias.
5 Sentir las lentillas
Normalmente, luego de un periodo de adaptación, no deberías notar que tienes las lentillas puestas, gracias a que son las adecuadas para ti.
Si las lentillas no son cómodas después del periodo de adaptación recomendado.
Lo recomendable aquí es, extraer las lentillas, utilizar las gafas y acudir a tu especialista.
6 Sensación de quemazón
Debido a que las lentillas tienen la capacidad de absorber fluidos, pueden acabar absorbiendo sin ningún problema otros artículos como los aceites, cremas y demás, incluyendo la suciedad. Lo cual puede provocar sensación de quemazón cuando entran en contacto con tus ojos.
La solución sería asegurarte de lavar bien las lentillas y tocarlas con las manos muy limpias. En tal caso que, la sensación de quemazón sea recurrente, lo mejor es dejar de utilizar esas lentillas y acudir a tu especialista para solucionar el problema.
7 Molestias al final del día
Muchos usuarios de lentillas han confesado sentir molestias en sus ojos al acabar el día, lo cual puede deberse al uso excesivo de lentillas o a la sequedad ocular.
Lo mejor en este caso sería acudir a un especialista y ver si requieres de lentillas con una mejor capacidad de hidratación, o debes usar lágrimas artificiales.
8 Afecciones oculares
Otro de los problemas comunes en cuanto al uso de lentillas, es que estas pueden llegar a producir enrojecimiento en los ojos, hinchazón y dolor. Ante esta sintomatología acude a tu profesional de la visión.
9 Malestar por lentillas sucias
Las lentillas también requieren de cuidados e higiene constante para poder ser utilizadas y que no causen dificultades, algo a lo que muchos usuarios no le dan importancia.
Pero la verdad es que, si este producto no se limpia y se le cuida como se debe, puede llegar a causar múltiples molestias después.
10 Problemas derivados de los excesos
Otro inconveniente que no podemos dejar pasar de largo, son los excesos al consumir alcohol, café, cigarrillos, entre otros.
Esto puede hacer que te deshidrates más rápido y hacer que tus ojos se sequen e irriten más fácilmente, lo cual traerá consigo otras complicaciones.
En este caso, lo mejor es reducir el consumo de estas sustancias y beber más agua, no solo tus ojos te lo agradecerán, sino que también el resto de tu cuerpo.